Según avanzan las semanas, es evidente que el impacto de la pandemia generará de forma inevitable repercusiones económicas y sociales. Pero, ¿cuál será el escenario económico y empresarial posconfinamiento?
A diferencia de otras crisis provocadas por causas económicas y bancarias, el nuevo escenario se replantea en términos de cambio de hábitos de los ciudadanos y los consumidores.
Durante estas semanas, jóvenes y mayores nos hemos confinado en casa y la brecha digital a la hora de comprar online se ha reducido. Todos nos hemos lanzado a comprar todo lo que necesitábamos al comercio electrónico. Curiosamente, son las generaciones más mayores las que, al tener un índice de riesgo mayor con el virus, más han tenido que comprar online o en cualquier caso, por vía telemática, habiendo crecido muchísimo los envíos a domicilio.
Datos del Gobierno de Reino Unido: el 43,6% de los mayores de 65 años han usado durante el confinamiento algún servicio de envío a domicilio de los supermercados.
Los jóvenes, en cambio, al ser el ir a la compra de las pocas actividades permitidas y por exigencia de los mayores, están entrando en contacto con el comercio de proximidad. El mundo al revés. En cualquier caso, las ventas online se han disparado en casi todos los sectores, incluidos productos con tan poca tradición online como los productos frescos, la jardinería o la pintura, entre otros.
Home-driven marketing: el nuevo paradigma
Los nuevos hábitos en nuestra sociedad van a estar marcados, sobre todo, por hacer más vida en casa. De hecho, entre los expertos se ha extendido el término home-drive marketing como el nuevo paradigma de la aproximación de las marcas al consumidor.
El home-driven marketing implica que las marcas y los negocios tendrán que desarrollar sus campañas de marketing a partir de la premisa por la cual sus productos y servicios serán preferentemente consumidos en el hogar.
La realidad de la crisis se ha impuesto a las resistencias de consumidores y empresas para dar el empujón definitivo al entorno digital. A muchas empresas esta nueva realidad les ha pillado fuera de juego o rezagadas y aquellas que aplazaban el desarrollo de proyectos digitales, tendrán que abordarlos de forma prioritaria.
A cada empresa, a cada sector de actividad, y para cada producto o servicio, nos toca evaluar el tiempo de permanencia de los nuevos hábitos. Algunos, permanecerán más o menos en el tiempo; otros, han venido para quedarse. Empieza por incorporar a la ecuación de tu negocio algunos de estos factores:
- Nueva regulación: distanciamiento social, horarios de apertura, medidas de higiene.
- Nuevas prioridades para el consumidor: medidas de higiene, servicios de envío a domicilio, nuevos productos, precios competitivos en tanto en cuanto muchos perderán capacidad de compra. En general, confianza en la marca y el negocio.
El home-driven marketing va a acelerar los procesos de transformación digital en nuestras empresas. De esta crisis saldrán reforzadas aquellas que acompañen en los próximos meses a los consumidores en el transcurso al nuevo paradigma.
La economía digital se impone en el nuevo escenario
Volveremos a las calles.
Volveremos a la panadería y reduciremos la cantidad de pan casero aunque de ningún modo desaparecerá ya de las casas una vez probada su calidad; bajaremos a la ferretería cuando necesitemos ayuda pero en muchos casos, evitaremos meternos en la tienda o deambular entre varios establecimientos si podemos resolver nuestra necesidad por redes sociales; evitaremos manipular armarios o picaportes en un almacén si podemos visualizarlos en 3D a través del sitio de comercio electrónico de nuestra marca de confianza; el teletrabajo, aplicado hasta ahora con cuentagotas en España, permanecerá de forma regular tras comprobarse que para muchas actividades, es más conveniente; volveremos al cine o al teatro aunque muchas de las millones de personas suscritas a servicios como Netflix durante la pandemia, preferirán tomarse las palomitas en el sofá; y de ningún modo volveremos durante un tiempo a revolver montones de pantalones, vestidos o toallas en las tiendas de moda y hogar, habiendo experimentado la comodidad de recibirlos en casa o en el trabajo.
Oportunidades digitales para el escenario posCOVID-19
No podemos adivinar cómo serán las empresas en cinco años. Por no saber, no sabemos si el distanciamiento social durará hasta el verano o hasta que encontremos la vacuna definitiva. Sin embargo, sí estamos seguros de que el futuro será mucho más digital.
El comercio electrónico será uno de los primeros receptores de nuevas inversiones en las empresas. Y cuando me refiero al comercio electrónico, no me refiero únicamente a poner el catálogo de tus productos en un sitio web. Los hábitos de los consumidores, que incluso pensábamos perennes para las generaciones más adultas, han cambiado en un mes y no hay vueltra atrás.
El consumidor se ha convertido definitivamente en usuario digital y la estrategia de las empresas debe adaptarse y responder a las nuevas rutinas.
- Revisa los nuevos puntos de contacto (y oportunidades) que se han creado. Piensa en un cliente que demanda y también consume tus productos o servicios desde casa.
- Capta la atención de tus clientes y potenciales clientes y comunícate con ellos a través de los medios digitales.
- La omnicanalidad pasa a ser el estándar. Quien esté ausente en digital, no podrá atender algunas de las necesidades que el usuario decidirá hacer sí o sí online. Y cuando no estés dos veces, buscarán alternativa.
- Lidera el conocimiento de tu ámbito de actividad mediante contenidos de valor para generar confianza.
- Posiciona tu marca, negocio o actividad en Internet mediante nuevas habilidades de posicionamiento web.
- Adapta tus procesos para responder a los nuevos patrones de consumo: comunicación directa con el consumidor, envíos a domicilio, integración en marketplaces, etc.
- Establece mecanismos para poder generar tus propias bases de datos de clientes y personalizar su experiencia.
- Incorpora nuevos servicios digitales que aporten valor más allá del producto.
- Descubre nuevas vías de ingresos ya sea mediante nuevos canales de distribución o mediante nuevos modelos de negocio.
Llevamos 6 semanas de confinamiento, nos quedan algunas más y no sirve de nada lamentarse. El año 2020 será recordado siempre y tenemos que evolucionar nuestros negocios para continuar.
El Índice de Digitalización de Empresas
En Hacemos Cosas llevamos semanas estudiando, analizando datos y comportamientos. Estamos preparados y nos sentimos responsables de apoyar a las empresas de la industria española en una nueva etapa marcada por la superdigitalización. Hemos creado el Índice de Digitalización de las Empresas (INDE), que permite hacer una autoevaluación del estado de la estrategia digital en la empresa. Confiamos en que te sea útil y esperamos poder acompañaros en los nuevos retos que tenemos por delante.
